El masaje de piedras calientes tiene una duración de 50 minutos y es aplicado con técnicas de relajación con una presion de suave a moderada combinadas con piedras calientes de obsidiana en cuello, hombros, brazos, espalda y piernas por ambos lados promoviendo una sensación de calma reduciendo el dolor muscular y articular mejorando la circulación sanguínea y linfática.